Piedra Luna
La Piedra Luna tiene una dureza de 6 en la escala de Mosh, lo que la hace moderadamente resistente al desgaste. pertenece al grupo de los feldespatos y se caracteriza por presentar el fenómeno óptico de adularescencia, por lo que la piedra refleja la luz tal como lo hace la luna en el cielo y en el agua.
Su color natural es blanco, pero puede presentar tonalidades de gris, azul, verde, naranja o arcoíris, debido a las impurezas o defectos en su estructura cristalina1.
Es una piedra que se asocia con la fertilidad, el parto y alivia los dolores menstruales. el equilibrio, la creatividad y la intuición. Además, ayuda a combatir condiciones degenerativas en la piel, los ojos y el cabello. Se dice que mejora la circulación sanguínea, el sistema hormonal, el metabolismo
Esta piedra también es asociada con los negocios, la protección, la buena suerte y el amor apasionado.
Se dice que representa a la Luna y que tiene propiedades energéticas y espirituales para estimular el chakra corona y el centro espiritual.
La Piedra de la Luna es considerada un talismán, el cual permite viajar hacia el interior y recuperar lo que el alma ha olvidado.
Consejos para cuidar para tu Piedra Luna
Evitar los golpes o las caídas, ya que pueden dañar su brillo o su color.
Limpiarla con un paño suave y húmedo, sin usar productos químicos o abrasivos.
Guardarla en un lugar seco y oscuro, envuelta en un paño o en una bolsa de tela.
No exponerla a fuentes de calor o de luz directa, ya que pueden alterar su efecto óptico de adularescencia.
Cargarla con la luz de la luna llena, para potenciar sus propiedades energéticas y espirituales.